Mi padre, Luis Maquieira Quiroga, además de haber sido un hombre a contracorriente, un amante del mar, viajero, un buscador de piedas preciosas en

el Amazonas, un idealista , un maravilloso cuentacuentos, mago de la madera y

una persona de profunda y rica conversación, fue también poeta.

Coincidiendo con la publicación del último compendio de sus poemas, Versos del agua, la Fundación Cuña-Casasbellas, con sede en Pontevedra, la cual se ocupa de la difusión del arte y de la poesía, me propuso hacer una exposición para abrir

el evento “Brumario Poético” 2012: serie de actividades artísticas, musicales y literarias, desarrolladas en el mes de Noviembre de cada año.


La exposición se realizó en la Galería Sargadelos de Pontevedra. Para ella, realicé una serie de autorretratos sobre las páginas de los antiguos libros -publicados por primera vez en Venezuela- que ahora se encontraban reunidos junto

a poesías inéditas dentro del nuevo volúmen. De esta manera, al unir su voz y mi propia emoción ante ella traducida a trazos, las palabras que desde mi infancia había escuchado recitar en tantas ocasiones, se hacían todavía más "mías". 


Como se puede observar en las fotos situadas bajo este texto, en mi trabajo artístico empleo además del dibujo, objetos que me ayuden a enriquecer o

acompañar lo que deseo expresar y compartir a través de la imagen. En este

caso, pequeñas cajas de madera abrazaban cada poema, remarcando su caracter

íntimo y delicado. Otros objetos de mi padre como sus prismáticos, su

brújula de navegación o algunos de los libros que más lo influenciaron,

llenaban también los pequeños receptáculos. 

Fotografía: Miguel Vidal

Fotografía: Andy Leal